domingo, 24 de abril de 2011

Ambigú….

EL QUE SIEMBRA SU MAIZ QUE RECOJA SU PILON

Gerardo Castillo Riera

gcastillor@hotmail.com

http://natiaito.blogspot.com/

Desde el asentamiento del hombre en America, ha sido el maíz su esencial alimento pero con las particularidades de cada región. A la llegada de los occidentales, el maíz se encontraba presente en cualquier parte del continente americano, de ahí que se llamó a los americanos "pueblos de maíz" y a sus culturas "culturas del maíz" en analogía con las "culturas del trigo" que se desarrollaron en el mediterráneo y con las "culturas del arroz" que se perfeccionaron en Asia. Tal era la importancia del maíz para los Mayas y los Aztecas que incluso tenia un Dios cuyo nombre era “Centeotl. Hoy en día existen varias teorías que tratan de explicar el origen de la planta; una nos dice que es un descendiente del teocinte, cultivo parecido al maíz, pero la mas acertada creo yo es la que nos da el Prof. Ronald Ramírez, que manifiesta que: “gracias a la datación por medio de Carbono 14 realizada sobre espigas de maíz encontradas en yacimientos arqueológicos del Valle de Tehuacan se ha sabido que el maíz era consumido en México hace 7000 años. Las mazorcas de aquella época se diferenciaban considerablemente de las que conocemos hoy en día. Medían entre 3 y 4 cm. de longitud y tenían escasa cantidad de granos cada una. Unos 1000 años después este maíz primitivo ya estaba domesticado. La evolución natural y las capacidades agrícolas de los indígenas precolombinos transformaron progresivamente esas pequeñas mazorcas salvajes en algo más parecido a lo que conocemos actualmente”.

Pero hablando de domesticación del maíz, podemos decir que nosotros en nuestra dieta diaria lo tenemos en diferentes formas, pero la más habitual es la suculenta y nunca olvidada arepa, como la empanada y últimamente la cachapa, que su consumo es nuevo para nosotros en esta parte del país. Primero aparecieron las cachapas de la carretera hacia Barquisimeto, Manuel Crespo, los primos y el primo, entre otros. Luego vendrían El Morocho y la mata de mango, pero la que verdaderamente expresa la idea de producción de ingenio es la Cachapera del Torrellas, como se le conoce, ubicada en la calle Monagas, esquina con la casa del Cuervo, a que Minerva e Isaias “El Papi”, Pereira. No es la cachapa tradicional solo con queso y mantequilla. No, fueron mas allá, pusieron a producir “la tarra” para aportar nuevas ideas a nuestra gastronomía, y preparan unas suculentas e inmensas cachapas en una gran variedad. Pueden ser jamón, queso amarillo, carne mechada, pernil, granos de maíz, tocineta, entre otros ingredientes pero además les colocan encima a todas queso fundido con crema de leche y queso parmesano. Cruz Mario Zubillaga, reconocido Epulón caroreño, recomienda una que llaman “la bomba”, lleva hasta gato, pero eso si, pidan que no le echen tanto porque se desparrama. Sigamos pues buscando iniciativas productivas que seguro nos sacaran de la crisis.

En la misma onda del maíz es nuestra receta de hoy.

TORTA DE ARROZ CON MAIZ Y JAMON

Ingredientes:
1 cebolla
4 cucharadas de margarina

3 tazas de arroz previamente frito

1 taza de caldo de pollo

Pimienta molida al gusto

1 lata de maíz

1/4 taza de queso parmesano

1 lata de petitpois

½ Kg. de jamón entero

Preparación:

En una olla, sofría la cebolla picada en la margarina, añada el jamón, el maíz, los guisantes, la pimienta y por último el arroz. Añada el caldo de pollo, deje secar el arroz un poco. Luego viértalo en un molde refractario untado de margarina. Espolvoree con el queso La Virginia, tape con papel de aluminio, hornee durante 45 minutos a 350º. Cuando el arroz esté bien seco y cocido, saque y sirva caliente. Y SALUD