domingo, 30 de enero de 2011

Ambigú….

CON BORDON Y ESCLAVINA.

AL COYON

Gerardo Castillo Riera

gcastillor@hotmail.com

http://natiaito.blogspot.com/

Me conminan Pablito Arapé y mi hermano Jesús Antonio a que tome el testigo en lo planteado en nuestro anterior articulo referente a la industria sin chimeneas. Pues bien, les acepto el reto pero con el compromiso que esto sea una especie de foro abierto y se dispongan ellos también a dar sus opiniones y sus propuestas. Por otra parte, varios conterráneos y amigos se me han acercado para plantearme su preocupación por la ciudad; la ven deteriorada y su economía en retroceso. Bueno a todos ellos los conmino ahora yo a que demostremos que tenemos esperanzas para nuestros hijos y nos propongamos a actuar y dejar solo las palabras, empecemos pues a crear la matriz de opinión de la industria sin chimeneas. Actuemos en consecuencia.

Ya que en artículos anteriores hablaba de El Coyón, que sea con este que comencemos nuestro peregrinaje turístico-gastronómico con miras a fortalecer nuestro terruño conociéndolo y divulgándolo; de ahí lo de el bordón y la esclavina, que junto al sombrero era el ropaje obligatorio de todo aquel peregrino que iba a su santuario.

Así, mi relación con el Coyón se remonta a mi infancia; los compañeros en edad podemos decir que tuvimos un aprendizaje Rusoniano, porque como en El Emilio, adquiríamos conocimientos directamente de la naturaleza, y creo es así en todos los de mi generación. Para nosotros una de las distracciones juveniles consistía en hacer excursiones en bicicleta o a pie a sitios un poco alejados, para ese entonces porque ahora las distancias no son tales, con la finalidad de conocer, disfrutar y conversar. Se puede decir que salíamos a campo traviesa a ver que conseguíamos. Uno de esos sitios era El Coyón, caserío aledaño a Carora. En el trayecto desde Carora además de echarle piedras a turcas, palomas e iguanas, que comíamos en el sitio, nos deleitábamos con datos, lefarias y flor de cují, el cual tiene un sabor muy parecido al tamarindo, entre otros. Pues bien, yo creo que casi desde ese entonces Ángel Perozo tiene un oasis en ese desértico lugar; “El Kiosco de Bahareque” que esta en la entrada al caserío San Félix. Ángel vende unas empanadas exquisitas de caraotas y de guiso, arepas rellenas y pan con carne. Así como conservas de buche y de leche de cabra, matejea fría cuando es temporada y unos “frescos” muy gélidos apropiados para pasar la canícula. Por supuesto para condimentar las empanadas y las arepas dispone de sendas botellas de suero picante y natural pero de cabra, toda una exquisitez. Pero lo mejor del Kiosco es su trastienda por lo acogedora y relajante además acompañada del trato pausado, amable y risueño de Ángel, es el verdadero oasis. Los reto a que me digan embustero. El me confirma lo de las arepas coyoneras que comente en artículo anterior y me dice además que las que las llevaban a vender a Carora eran las Sras Juana de Dios Nieves, Elvira Franco, Lucia Rojas y la Sra. Aurora, y que además llevaban arepas de ñema que eran como una especie de cachapas. A la masa de maíz le incorporaban huevos y aliños. Imagínense esas arepas con maíz pilao, huevos de gallina picapica y aliños. ¿Verdad que provocan?

Pero también en el Coyón esta el Restaurante La Montelibanesa del amigo Javi Saldivia que además de la tradicional tostada caroreña prepara la parrilla de pescado y la parrilla de monte. Así que dispónganse a visitar estos sitios cercanos a Carora y pasaran un agradable y diferente día de descanso.

RECETA:

La receta de hoy la voy a tomar del libro: “Lara de Mesa y Mantel”, editado por la Organización El Tunal de mi estimado amigo Juan Alonso Molina, historiador especializado en temas gastronómicos.

LOMO DE COCHINO EN SALSA DE SEMERUCOS

Ingredientes para 12 personas.

-1 lomo de cochino entero, limpio del exceso de grasa superficial

-1 limón grande, maduro, partido por la mitad

-1 Cucharada de orégano entero

-2 tazas de vino tinto Viña de Altagracia

-6 dientes de ajo machacados

-2 cucharadas de mantequilla con sal

-1 taza de pulpa de semerucos

-6 clavos de olor

-Sal al gusto

Preparación.

Se lava el lomo bajo el chorro de agua fría y se seca. , Luego se le exprime el limón, restregándolo bien, con este dándole vuelta a la cáscara, se lava de nuevo bajo el chorro y se seca nuevamente.

Se le hacen incisiones a todo lo largo con un cuchillo de hoja delgada y en estas se le introducen los ajos machacados con la mantequilla. Se pasa a una bandeja honda, se le agrega el orégano y 1 taza de vino, se tapa con papel aluminio y se deja macerar de un día para otro en la nevera. Se precalienta el horno a 380º C y se hornea tapado, aproximadamente durante una hora, hasta que al introducirle el cuchillo el líquido que surja sea incoloro. Luego, se extrae de la bandeja y se deja reposar.

Mientras, se desglasa la bandeja con la taza de vino restante, removiendo su fondo con cuchara de madera, se agrega la pulpa de semerucos, los clavos de olor, se sala y se deja reducir hasta adquirir la consistencia de una salsa ligera.

Para servir, se rebana el lomo y se baña con la salsa.

(Desglasar: es la acción de añadir vino a una fuente de horno o una cazuela donde se ha preparado la comida y así conseguir aprovechar los jugos concentrados y grasa de la cocción para la elaboración de una salsa.)

SALUD

No hay comentarios: